De acuerdo con el informe del Emisor, “durante el último año el mercado ha venido descontando una desaceleración económica global, e incluso una posible recesión en las principales economías desarrolladas, como consecuencia de los choques negativos de oferta (e.g. invasión rusa a Ucrania y la disrupción de las cadenas globales de suministro tras la recuperación pospandemia), la pérdida de poder adquisitivo dado el fuerte aumento de la inflación, y la política monetaria contractiva adoptada por el grueso de los bancos centrales para contener dicho aumento. Sin embargo, durante el 2T23 la actividad económica sorprendió al mercado en las principales economías desarrolladas al continuar presentando un desempeño resiliente, tal como se evidencia, por un lado, en el buen comportamiento del mercado laboral, el cual continuó presentando tasas de desempleo en niveles similares o inferiores a las observadas previo al comienzo de la pandemia”.

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