del ajuste de la política monetaria. Las sorpresas al alza en la inflación registradas en el cuarto trimestre, las mayores presiones cambiarias acumuladas a finales de 2022 y la indexación a niveles más altos de inflación fueron los principales factores que llevaron a incrementar la senda de inflación para todo 2023 y parte de 2024. Para el presente año se espera que las presiones cambiarias acumuladas sigan siendo importantes y superiores a las previstas anteriormente, aunque deberían ceder paulatinamente, como lo sugiere la brecha inflacionaria del tipo de cambio real”.