La controversia tuvo por objeto determinar si procedía la nulidad absoluta de un contrato de suministro, derivado de la declaratoria de nulidad de su acto de adjudicación y el consecuente restablecimiento del derecho de la parte demandante, quien consideró que presentó la mejor propuesta en el proceso de selección. Para el a quo la respuesta a ese cuestionamiento fue negativa, por cuanto no se acreditó que la propuesta de la parte actora fuese la más favorable para la Administración; el apelante insistió en sus pretensiones y reprochó la sentencia de primer grado, por inconformidades con la valoración probatoria efectuada.