El concepto indica que el representante legal constituye uno de los órganos de administración de las personas jurídicas, el cual tendrá como principal función la representación del ente jurídico. Así, la representación legal puede ser ejercida por una persona natural o jurídica, quien es nombrado por la asamblea general, la junta de socios o la junta directiva, en los términos y condiciones que establezcan los respectivos estatutos sociales.