El endoso de facturas comerciales es un mecanismo regulado que permite la transferencia de derechos de cobro a un tercero. Según la Ley 1231 de 2008, la factura es un título valor que puede ser endosado, otorgando al nuevo tenedor derechos de cobro ante el deudor. Este debe aceptar el endoso y realizar el pago al legítimo tenedor del título, que puede ser el emisor original o quien lo haya recibido mediante endoso. La negativa del deudor a pagar puede ser considerada una inobservancia de la ley mercantil. Además, según el artículo 6º del Decreto 2669 de 2012, el endoso es válido incluso frente a acuerdos previos que prohíban tal acción. Asimismo, la legislación establece que cualquier estipulación que limite la circulación de la factura será considerada nula. Por lo tanto, es fundamental que los deudores cumplan con sus obligaciones frente al tenedor del título para evitar consecuencias legales.