A través del concepto, la ANM indicó que siempre que se trate de uso de material estéril o sobrante que no sea sujeto de beneficio económico, se considera que la autoridad minera carece de competencia para celebrar contratos de concesión minera o conceder autorizaciones temporales para su utilización o reutilización.
Lo anterior debido a que no se tratan de minerales y, por definición técnica, son materiales sin valor económico y que no contiene minerales de valor recuperables y, en ese sentido, no son susceptibles del pago de contraprestación alguna a favor del Estado.
Descargar documento